Carrie, Samantha y Miranda pasan una segunda semana en Los Ángeles. Carrie y Samantha a una fiesta, pero no les dejan entrar. Afortunadamente, uno de los invitados, Keith Travers, consigue que las dejen pasar, y Carrie pasa el rato con él y acaban en la cama. Miranda se encuentra con Lew, un viejo amigo de Nueva York y descubre que ha cambiado mucho desde que vive en Los Ángeles. Charlotte huye de su matrimonio sin sexo y coge un vuelo para reunirse con sus amigas en Los Ángeles.