La tía de las Halliwell pide ayuda a las hermanas cuando algunos cadáveres aparecen en su pueblo. Pero la verdadera intención de la tía Gail es robar los poderes de las Encantadas para recuperar su juventud, en manos del demonio Cryto. Cuando las hermanas descubren que sus poderes han sido robados por ellos, Piper ve esta situación como una forma de recuperar una vida normal -sin brujería- y vacila en intentar recuperar sus poderes perdidos.