Con el fin de acabar con un CEO de una agencia de bolsa que trafica influencias e información privilegiada, Peter envía a Neal encubierto. Las cosas se complican cuando es en un ring de boxeo donde se traduce la supremacia física en premios financieros. Peter comete un error que lleva a revelar el escondite de Sam, quien huye, provocando el enojo de Neal que termina desahogandos en el ring.