Goro advierte al equipo universitario que si no lo atacan en serio, lanzará un juego perfecto contra él. Todos se sorprenden al escuchar tal proclamación, pero eso no saca a Toshi de su estado depresivo. en la séptima entrada, Goro comienza a cansarse, y depende de Toshi tomar las señales correctas para sacar al JV de este aprieto y superar su propio miedo a que Goro se vaya.