Ante la superioridad técnica y táctica de Misugi, Tsubasa pierde coraje y es incapaz de reaccionar. El partido está muy mal embarcado para su equipo, liderado por dos goles. Fue entonces cuando intervino Wakabayashi, quien llegó a Tokio expresamente con la esperanza de jugar la final. ¿Conseguirá su discurso motivar al capitán de Nankatsu?