El 4 de octubre de 1992, los dos motores del ala derecha del vuelo 1862 de El Al se desprendieron pocos minutos después del despegue, dañando los sistemas hidráulicos y el borde de ataque del ala. En la aproximación, los flaps y slats del ala izquierda se desplegaron, pero en el ala derecha no, debido al daño. La aeronave se inclinó a la derecha y se estrelló en un edificio de apartamentos, matando a los 4 ocupantes a bordo y a 39 personas en tierra. El accidente fue causado por la fatiga del metal en los soportes de los motores.