El 18 de agosto de 1993, el vuelo 808 de American International Airways, entró en pérdida, se desplazó a la derecha y se estrelló contra el suelo a 1 cuarto de milla de la pista, mientras hacía la aproximación final al campo de aviación Leeward Point en la Bahía de Guantánamo, Cuba. Los 3 tripulantes a bordo sobrevivieron con heridas graves. El accidente se debió a la fatiga de los pilotos sumado a la decisión de hacer la aproximación complicada, habiendo una opción más fácil disponible.