En el 2005 Joseph Shaw, un orientador que trabajaba en un Centro Juvenil, apareció muerto, justo el día anterior a tener que testificar por el asesinato de uno de sus pupilos. Al año siguiente salta la alarma, cuando la policía recibe la información de que la tarjeta de crédito de Shaw ha sido utilizada. Todo indica que el hombre ha regresado de entre los muertos.