Frank trabaja para reivindicar al detective Douglas McKenzie, acusado por abuso de autoridad. Además, Danny y Báez localizan al asesino responsable de la muerte del guardaespaldas de un rapero; Jamie es escéptico sobre una relación entre Espinoza y una nueva oficial novata, Sarah Brooks; y Eddie se infiltra para ayudar a Erin a investigar un misterioso culto.