Allison sueña que un hombre secuestra a su hija Ariel y decide contárselo al fiscal del distrito. Sin embargo, al empezar a investigar descubre que el sospechoso es el testigo de un robo y que ha ofrecido su total colaboración a la policía. Devalos piensa que el posible embarazo de Allison puede estar alterándola. Mientras tanto, Joe intenta ayudar a Ariel en matemáticas y descubre algo sorprendente.