Neela decide, ante su inseguridad y falta de confianza, buscar algún trabajo alternativo y no relacionado con la medicina. Pratt se reincorpora tras el accidente a su puesto de trabajo pero sus recomendaciones a algunos pacientes están causando algunos problemas. Un hombre herido de bala durante un atraco ingresa en urgencias con muerte cerebral. Su novia y único pariente próximo pide que su hígado sea transplantado a un amigo común ya que como seropositivo no tiene acceso a una operación y le salvaría la vida. Carter persuade a la Dra. Corday para ello, aunque esto conlleve incumplir la normativa del hospital y las leyes federales.