El 1 de julio de 2002, el vuelo 2397 de Bashkirian Airlines chocó con el vuelo 611 de DHL, en el espacio aéreo alemán, cerca de Überlingen, matando a las 71 personas a bordo de ambas aeronaves. Los pilotos del vuelo 611 siguieron las indicaciones de su sistema anticolisión (TCAS), que les indicó descenso. Sin embargo, los pilotos del vuelo 2397, obedecieron al controlador de tráfico aéreo en vez del TCAS y descendieron. Había un solo controlador a cargo de dos pantallas, ya que su compañero estaba tomando un descanso.