Catorce años después de que apareciera sin vida el cuerpo de una niña de doce años, a quien habían dibujado extraños caracteres en espalda, piernas y pecho, es encontrado el cadaver de una joven mujer fallecida en circunstancias similares al caso anterior. Al iniciar las oportunas investigaciones Rush y Valence estiman oportuno descubrir qué sucedió exactamente en el caso de la niña porque creen que ambas muertes guardan una estrecha relación.