Lupin y Fujiko logran un atraco con éxito; es decir, hasta que Zenigata logra disparar a Lupin con un dardo tranquilizante. Zenigata lleva a Lupin a la cárcel. A pesar de los mejores esfuerzos de Fujiko, ella no puede sacar a Lupin de la prisión, y Jigen no brinda ayuda, alegando que Lupin puede irse cuando quiera. Pasa un año, y Lupin sigue en la cárcel y su fecha de ejecución se acerca. Fujiko y los demás intentan ayudar a Lupin a salir de la cárcel.