Lupin tiene los ojos puestos en el atraco de una joya, pero encuentra sus manos un poco ocupadas. ¡Algunos niños afirman que él es su padre! Jigen y Goemon se burlan de la impropiedad de Lupin hasta que se encuentran en el mismo lío. ¿Puede la pandilla hacer malabarismos con su trabajo y su paternidad?