Marcy se enfada con Steve porque este se dedica a comerse con los ojos a una hermosa reparadora de neveras en compañía de Al y se va de marcha con Peggy, que la lleva a un local de striptease masculino. Aunque al principio le parece inmoral que todos los bailarines conozcan a Peg por su nombre de pila, Marcy acaba animándose a depositar dólares en las entrepiernas de los muchachos con tanto fervor que acaba por perder su anillo de casada en los calzoncillos de un exótico stripper llamado Zorro.